Tras 5 años de espera, nuestra Municipalidad logró quebrarle la mano al destino y derrotar ante la justicia al gran gigante contaminador. Tras cumplirse sólo un año de haber puesto nuestra primera querella, celebramos este triunfo y vemos con aún más esperanza el momento de la formalización de los responsables del caso que hoy nos convoca, los efectos de la nube tóxica de agosto y septiembre de 2018 que lleva nuestro abogado Remberto Valdés y que según el Senador Francisco Chahuán, líder de la comisión de Medio Ambiente, está cada vez más cerca.
Recordamos perfecto ese 2014, cuando todos los vecinos nos vimos tremendamente afectados por el vertimiento de 37.800 litros de combustible en nuestra bahía de Quintero, provocando no sólo una tremenda conmoción de la comunidad, sino afectando directamente nuestra flora y fauna marina, además de la alimentación y sustento de varios de nuestros hogares al prohibirse la extracción de pescados y mariscos en la zona, lo que imposibilitaba el normal funcionamiento de nuestra caleta, ventas y por consecuencia, al igual que ahora, el turismo.
¿El responsable? Nuevamente #ENAP! Producto del rompimiento de una cañería de transporte de hidrocarburos que desembarcaban desde el buque tanque Mimosa.
Tal como la que iniciamos el año pasado tras la nube tóxica que comenzó en agosto, y de la cual -a través de nuestro abogado Remberto Valdés- acabamos de interponer la décima querella, la batalla de 2014 no fue fácil. En aquella ocasión fue nuestra Municipalidad de Quintero quien lucho por los intereses de su jurisdicción ante el Tribunal Ambiental y quienes no se dieron por vencidos incluso tras los nefastos resultados de 2018, cuando el organismo determinara que no existían los perjuicios alegados.
Hoy, la Corte Suprema revierte aquella injusta decisión determinando que la Empresa Nacional del Petróleo, SÍ es responsable del daño producido en nuestra bahía y lo obliga a un completo análisis de riesgos por descarga de combustibles desde naves, además de realizar un programa de monitoreo específico para hidrocarburos con límites más bajos que los actuales e implementar un sistema de control apenas ocurrido un derrame de esas u otras sustancias, las que deben estar implementados en un plazo máximo de un año, hecho del que incluso es Senador (RN) Francisco Chahúan se mostró optimista por sentar esto un importante paso que allana el camino a nuestro actual móvil, la nube tóxica!
Escuche sus exclusivas declaraciones y sigamos aunando fuerzas, pues queda demostrado que, en estas lides, un año es nada, y aunque quizás sea un largo andar… #juntoslovamosalograr alzando la voz gritando…
#ENAPdiLaVerdad